de mi voz y de mi suerte…
Dueña del fondo desconocido
de ese vientre salvaje que en mí acuno,
de ese vientre salvaje que en mí acuno,
dueña de todo lo que persigo,
dueña de mi mundo, dueña de mis frutos…
Esposa de mis querencias,
descanso hermano del hermano repecho,
estrella de todos mis cielos,
sol en que lloro tus ausencias…
Esposa en potencia del viento
que aviva toda brasa
en el horno de mis fraguas,
en el agua de mis pensamientos…
ser junto a ti quien soy,
y desgarrado donde estoy
pegar el grito del hombre eterno…
Hambrían tanto mis labios
poseer aquellos, los tuyos que fueran los primeros,
poseer tu ser que habrá de ser el recuerdo
que ya en mi suerte o en mi muerte
mi alma seguirá besando.
Tu vida que me has permitido guardar,
tus marcas, tu playa, tu campo
donde me recosté, son a mi lado,
no es solo un recuerdo, es todo amar…
No es un gran final, entrar a sollozar
en un llover de dos o tres pañuelos;
no es el pago de tanto hacer, tocar a duelo
por ser preso de mi alma y del mar
Poema sin tiempo, poema,
ni han alzado sus manos en sus palcos,
el guión nunca ha hablado de epitafios,
ni el bien quiere inhumar tal sufrimiento…
Poema de amor, dueño de mi mundo,
poema abierto, sueño de toda noche,
poema dócil, vivido sin un reproche,
canto de esperanza ubicada en este asunto…
Balada vertical, palabra de deseos,
recorre por favor todo mi lago,
y así como aplaques mi sufrir y mi pecado
sé el fuego que a toda célula informe en mí
Lagtal, 6 de diciembre de 1975
229º XXIVº del carrer
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Hola, qué bueno que viniste